
¿Y si el experto está equivocado?
Por más de 1300 años, los médicos estuvieron equivocados
tanto en occidente como en oriente
Se puede decir que Hipócrates (Hipócrates de Cos – 460 – 370 a. C), de la antigua Grecia, es el médico más famoso del mundo.
Ejerció durante el llamado siglo de Pericles (época de apogeo cultural en Atenas). Es ampliamente considerado uno de los más destacados exponentes en la historia de la medicina, y se considera el «padre de la medicina». De ahí el “juramento hipocrático”.
Los romanos, la hegemonía de entonces, despreciaban a todos aquellos que no fueran de su mismo “linaje”. Por eso, llamaban a Galeno, de manera despectiva, “grieguecillo”, a pesar de que su padre era un hombre rico.
Galeno, luego de trasladarse a Roma, empezó a tener gran prestancia y reconocimiento como médico, al punto de ser contratado al servicio de las élites; incluso llegó a ser el médico del emperador Marco Aurelio.


Galeno realizó muchas contribuciones valiosas a la medicina, pero entre las más famosas, están sus tratados de anatomía, con exquisitos dibujos, que se reprodujeron en todo occidente y oriente, incluso más allá del fín de la Edad Media.
En la época de Galeno, la disección de cadáveres humanos era repudiada e ilegal. Por lo anterior, las disecciones y descripciones anatómicas de aquel, normalmente se realizaban en animales, en especial en primates (simias) y las consideraba muy similares al humano. Este “pequeño detalle” se olvidó con el tiempo.
¡Pasaron más de 1.300 años, en los que todos seguían la anatomía de Galeno!
Pero llegó Andreas Vesalius (1514-1564), y empezó a darse cuenta de que varias de las descripciones de los libros de Galeno, no coincidían con las disecciones directas realizadas, ahora en humanos, por parte de Vesalio (latinizado).
Investigando en el tiempo, Vesalio descubrió (redescubrió) que las disecciones de Galeno se realizaban en animales. Vesalio entonces, se vio obligado a contradecir al “experto”.
Ante esta situación, Andreas Vesalius, se dedicó a trabajar de manera frenética. Los grabados y dibujos de sus disecciones fueron realizados por los mejores dibujantes e ilustradores de Europa.
La carrera de Vesalio, era reconocida en muchas partes, y ya enseñaba entre otras, en la Universidad de Padua entre 1537 y 1543. Además, acompañó a los reyes de España Carlos V y Felipe II en sus campañas como médico particular, con lo que pudo adquirir conocimientos excepcionales de cirugía. Vivió muchos años en España, de ahí su nombre en español (latinizado).
El estar relacionado con la realeza, y también con la riqueza y el conocimiento más avanzado de su época, le permitieron crear y publicar con la más alta calidad de su tiempo, en 1543, su más famosa obra: “De Humani Corporis Fabrica Libri Septem” – (Sobre la estructura del cuerpo humano en siete libros), con 273 ilustraciones.
Se éxito fue inmediato, marcando el establecimiento de la anatomía como ciencia descriptiva moderna.
La medicina le debe mucho a Hipócrates y a Galeno. Pero también a Andreas Vesalius, quien muy a su pesar, tuvo que contradecir a un experto.
¡A veces, un gran experto, puede estar equivocado!
¡Siempre se debe pensar y analizar!
